La ética en los negocios es un elemento clave del liderazgo y la estrategia de las organizaciones. Las empresas no trabajan únicamente para un fin económico, ya que toda acción empresarial debe estar alineada con unos principios que trascienden el objetivo de perseguir una mayor rentabilidad.
O dicho de otra forma, la rentabilidad a cualquier precio siempre tiene consecuencias, tanto para las personas y empresas de nuestro alrededor, como para nuestra propia marca. Es por eso por lo que en los últimos años se ha puesto un enorme énfasis.
¿Qué es la ética en los negocios?
Consiste en un conjunto de valores y comportamientos alineados con los objetivos de la empresa y cuya función es crear un ecosistema saludable y equitativo que tenga en cuenta los intereses y necesidades de las distintas partes involucradas, desde la propiedad y dirección de la empresa a la fuerza de trabajo, los proveedores y los clientes.
La ética debe acompañar a todas las estrategias y técnicas que se utilicen para obtener rentabilidad en la organización. Dentro de ésta no sólo se incluye todo lo que respecta al “compliance” o cumplimiento normativo, sino también aspectos relacionales y organizacionales que tienen que ver con el liderazgo empresarial y la responsabilidad social de la empresa.
¿Qué importancia tiene la ética empresarial?
La ética empresarial en los negocios forma parte intrínseca de la cultura de la empresa. Su finalidad tiene distintas vertientes.
- Crear un entorno laboral saludable: trabajamos para ser más felices y aportar un bien a la sociedad, por lo que no tiene sentido que se apliquen técnicas poco éticas que perjudiquen a alguna de las partes involucradas en la organización.
- Mejorar la sociedad en la que vivimos: las empresas tienen un deber ético con la sociedad, su objetivo no debe ser única y exclusivamente la rentabilidad a cualquier precio. El desarrollo económico tiene que ver con organizaciones que respetan la ley, son lugares agradables para trabajar, no engañan a los clientes y trabajan para preservar la sostenibilidad del planeta.
- Crear una buena imagen para la empresa: el comportamiento ético de una organización influye en la percepción de su marca, por lo que apostar por valores que ayuden a mejorar el entorno tendrá una repercusión en la visión que las personas y empresas tienen de nuestra organización.
Principios de la ética en los negocios
De acuerdo con la Fundación Étnor, organización sin ánimo de lucro enfocada en la ética de los negocios y las organizaciones, estos son los 10 principios en los que se basa la ética en los negocios.
- Integridad: tiene que haber coherencia entre lo que la empresa piensa, dice y hace.
- Confianza: está relacionado con la reputación que la empresa posee y proyecta hacia los demás.
- Justicia: tiene que ver con la distribución de los beneficios.
- Diálogo: las decisiones deben tomarse facilitando la participación y aportación de distintas partes.
- Transparencia: es necesario apostar por una comunicación interna y externa que aporte la máxima confianza a la organización.
- Dignidad: debe promover los derechos humanos.
- Legalidad: las empresas deben cumplir con las obligaciones legales que marca la legislación.
- Compromiso cívico: es indispensable que las empresas sean conscientes de su responsabilidad social corporativa.
- Ecología: la mejora del medioambiente debe ser un aspecto incuestionable de la actividad de la empresa.
- Responsabilidad: la organización debe aportar respuestas ante las necesidades y expectativas de la sociedad.
Ventajas de la ética en la empresa
Es de gran importancia que las organizaciones entiendan la importancia de los valores y principios éticos en el desarrollo de sus actividades.
No se trata de aspectos cuyos beneficios no pueden medirse, sino de principios que pueden afectar enormemente a la percepción que la sociedad tiene sobre una marca y los resultados que ésta genera.
1. Atraer clientes comprometidos y corresponsables
Los valores éticos de una empresa pueden ser un elemento que influya en la atracción de clientes potenciales.
Hay personas que ante la amplia competencia que existen en determinados sectores eligen en empresas con cuyos valores se sienten identificadas a la hora de comprar productos y servicios.
2. Contratar y fidelizar a talentos que se identifican con tus valores éticos
Muchos profesionales deciden trabajar en empresas con las que se sienten identificados. La ética empresarial es sin duda un factor que puede ayudar a atraer a profesionales comprometidos que sólo estarían dispuestos a poner sus conocimientos y habilidades al servicio de empresas que cumplan con ciertos valores éticos.
Desarrollar la ética empresarial en los distintos ámbitos de la organización, desde el modelo de negocio hasta las prácticas del departamento de ventas, pueden ser aspectos decisivos a la hora de conseguir que profesionales altamente cualificados decidan trabajar en tu compañía frente a la de tus competidores.
3. Obtener premios y reconocimientos
Las empresas que hacen de la ética uno de los pilares de su modelo de negocio y organización pueden obtener premios y reconocimientos de instituciones públicas o privadas para premiar su compromiso. Esto aporta una gran proyección a las empresas, que han sido galardonadas por su compromiso ético con determinadas causas, lo que influye en que puedan hacer frente a nuevos desafíos.
4. Prevenir situaciones de crisis reputacional
Los principios éticos en las organizaciones tienen un papel anticipatorio ante las graves consecuencias que puede tener la falta de ética en los negocios.
Si se previene y se toman medidas ante comportamientos que puedan generar en una crisis reputacional para la marca, se evitarán situaciones en las que la empresa pueda perder clientes o experimentar el rechazo y boicot en las redes sociales por parte de personas ofendidas por las acciones poco éticas de la compañía o sus representantes.
Cómo aplicar la ética en los negocios y el liderazgo
Desde el Máster MBA Valladolid somos conscientes de que los valores éticos de los directivos de las organizaciones se vislumbran en las estrategias y cultural empresarial de las compañías.
Por eso, pensamos que la formación es uno de los pilares básicos para el desarrollo de perfiles de liderazgo que reconozcan los principios éticos como la base que debe acompañar el crecimiento económico de la empresa y de la economía en su conjunto. Te invitamos a descubrir y aplicar la ética empresarial en todas las áreas de tu negocio para marcar la diferencia en el mercado.